Nuestro apoyo a las tomas de los colegios en la Ciudad de Buenos Aires, posible lectura:"La Escuela de Noche" de Cortázar y sugerencias para descargar música y escribir una crónica.
"MOSCÚ, BÉLGICA (Bélgica, 2008) reúne a un camionero que constantemente viaja a Italia con una dama que casi nunca sale de su barrio de una pequeña ciudad belga. Ni el camionero representa el imaginario colectivo que se ha instalado sobre la profesión, ni la dama se comporta exactamente como se suponía, algunos años atrás o ahora mismo, lo hacían o hacen las señoras con hijos. Por lo pronto él, que aún no ha cumplido los 30 años de edad, es un hombre de trabajo, rudo pero tierno, intransigente en sus negocios pero soñador en lo que al resto de su vida refiere; su mujer, a quien veremos en un par de escenas, lo abandonó por un hombre más rico. Ella, que ya ha cumplido los 40, es trabajadora, ama de casa, malhablada, malhumorada y madre de dos hijos que cría como puede, mal que les pese a ambos, que al principio no la entienden, después quizás sí; su ex marido, por su parte, también la dejó, en este caso por una mujer más joven. A esta segunda mujer también la veremos en un par de escenas. Pero la película, que consagró al director Christophe van Rompaey, sigue con entusiasmo a los dos enamorados “tardíos”, que como los viejos modelos del género “comedia romántica de Hollywood de los años cuarenta” al principio se pelean y se llevan mal, y después también, pero eso ya no importa. Lo que sí importa es la movilidad (social, espiritual, sentimental, viajera) y la posibilidad o chance de cambiar y de aferrarse a algo que el relato le atribuye a estos dos individuos tan reconocibles, queribles, europeos y universales."